En la actualidad nos encontramos en el proceso de tratar de hacer las cosas menos complejas, no pensar que todos tienen que tener la misma línea de pensamiento para sentirme que todo está bien, tratar de soltar y ser menos estricto, sin requerir de los demás certificaciones y reconocimientos, donde muchas veces de alguna manera compras tu futuro.

La vida laboral debe ser más simple, solo es un rol, la gente quiere trabajar, realizarse con su contribución, aportar, pero por sobre todo ser feliz. La vida laboral no debe ser el canal para resarcir los problemas sociales, hay otros caminos para ellos, como el activismo, NO debemos hacer tantas distinciones de género donde generamos títulos a las empresas donde las mujeres son felices, la distinción es una forma innecesaria de acentuar las diferencias y generar revanchismo, es interesante como empresas que se jactan que las mujeres son más felices no cumple el horario de trabajo de las chicas como en los bancos en Bolivia sin ninguna demanda de por medio;  y menos para vanagloriarse por estar en las mejores opciones de trabajo cuando sabemos que tiene una cantidad importante de despidos y mala atención a los clientes, tampoco necesitamos universidades para que certifiquen prácticas laborales que son carísimas y por historia las universidades no es el mejor camino de los entregables técnicos.

Estoy siendo más sincero con la visión de la gestión humana, para que deje de ser el cuento que solo lo entendemos lo que trabajamos en esa gestión y tengamos como opción de pensar más como el resto que solo quiere ser útiles y tener un mundo que explorar y amar que nos espera.